lunes, 21 de septiembre de 2009

Escapando del ego.

No hay duda que la vanidad hace crecer al orgullo y que este en su momento se vuelve soberbia. También es claro que estos siempre fueron las causantes de la mayor parte de problemas en el mundo, pero aun así existen y crecen en las personas que siguen protegiéndose de los demás con la ayuda de esos sentimientos tan poco nobles; sobre todo cuando buscan ocultar la verdad. Existen siempre preguntas difíciles de contestar en torno a estas como ¿Cual es el motivo del orgullo en las personas y como es que somos capaces de perder tantas oportunidades por enfrascarnos en creer que la dureza de nuestro carácter o el recelo creado por algún hecho nos lleve hacia la tristeza de saber que ni arrepintiéndonos lograremos recuperar aquello que perdimos? ¿Es una estupidez mas del ser humano o simplemente ocurre porque al nacer y estar solos, intentamos proteger demasiado nuestro ego para que nadie lo pisotee; o en todo caso lo vuelva a pisotear justo cuando pensábamos que éramos indestructibles, preciosos y superiores?Es un poco de ambos, en primer lugar porque nuestra naturaleza es ser entupidos y actuar con el pasar de los días de modos irregulares, algunas veces por miedo y otras solamente por orgullo. En segundo lugar es cierto que protegemos mucho nuestro ego, porque nos enseñan desde pequeños a actuar con cuidado, mirar por encima del hombro y hasta hablar mal de los demás con tal de proteger nuestros actos y forma de pensar para que no se burlen o nos digan que estamos equivocados.Suele ocurrir que por no ver golpeado nuestro orgullo [cuando nos dicen las cosas de frente] nos defendemos dejándole de hablar a las personas que en cierto modo sentimos nos hicieron daño, no planteando lo que realmente queremos por miedo a que nos digan "no me gusta" o a que hablen de la forma como actuamos ante los demás. El miedo radica en que nuestros sentimientos se muestren ante personas que no los entiendan y critiquen u odien sin conocerlos realmente.Es difícil entender al orgullo y mucho mas aún a las personas orgullosas, que somos la gran mayoría, pero es mas difícil aun cuando no aceptamos que la soberbia gobierna nuestra vida y vivimos felices sabiendo que si esta no se ve afectada, lo seguiremos siendo.Siempre es triste saber este tipo de cosas y peor aun es no poder ni querer hacer nada por cambiarlo.De que sirve el orgullo o la vanidad si solo nos hacen perder lo que queremos, dejar pasar lo que necesitamos y escapar de lo que deseamos. Solo hay una forma de encontrar respuestas verdaderas y es buscando el modo de enfrentarnos a nuestro ego, al maldito reflejo que algunas veces hace que creamos que el mundo gira a nuestro alrededor cuando en realidad solo somos un ínfimo grano de polvo en un inmenso universo desértico cubierto de enormes Dunas de arena

No hay comentarios.: